Juegos de estrellas

JUEGOS DE ESTRELLAS

Mírala ahí fuera asomada.

Ahora se ha vuelto a esconder.

Mira, mira, agazapada

quiere jugar otra vez.

Quiere jugar a su juego,

al que se le da tan bien, 

al de ver el cielo negro

y de pronto aparecer.

* * *

Siembra que te siembra sueños

todo para que después

me los prohibas recoger.

¡Se pudren en el granero!

Ayer mi alma quería trigo

y yo vine a cosechar

miles de campos contigo

que no pude ni pisar.

Ahora como ves te sigo,

cansado de caminar

pero sin parar de andar,

porque de esperanza vivo.

No sabes cuánto maldigo

haber jugado a este juego

sin opción para el retiro

en el que sigo perdiendo.

Puede que no tengas culpa,

sé que yo jugué fatal,

pero ahórrame torturas

como hacerte desear.

Agradezco tu sonrisa

pero así no va a acabar.

Mientras tú nadas deprisa

yo no sé ni qué es remar

así que, mientras, me invento

que ha acabado la partida,

ni ganada ni perdida

con un simple empate a cero.

¿Pero cómo fingir nada

si sabes que hay algo dentro?

Y a ese problema me enfrento 

cada noche. Y las mañanas

me las paso sonriendo

por si acaso me topara 

cara a cara con tu cara

y se detuviese el tiempo.

Y yo me elevase al cielo

para hablar de igual a igual

y mantenernos en vilo

mientras te digo al oído:

No quiero sueños podridos

ningún campo ni trigal

ningún juego traicionero

ni verte estando dormido

nada, porque en realidad

a ti, estrella, es a quien quiero.

(18/3/2013)